Juan José Cánovas: "Lo contrario de Panem et circenses, versión Totana"

Hubo un tiempo en que todo parecía jauja. En Totana gobernaba el PP (La derecha) y prometía no subir impuestos nunca aunque aumentase el doble el personal, salarios o personal de confianza. Se decían "buenos gestores" y el pueblo los creía, votándolos varias veces.

Lo que en realidad hacían era sacar prestamos sin importarle los interese, cláusulas de usura, ni si no podrían pagarlos. Ingresaban millones de euros de Convenios Urbanísticos y se los gastaban de forma alegre porque "nunca acabaría el río de dinero que entraría al Ayuntamiento. Compraban terrenos que no valían (ni valen ni valdrán) por más de 3 millones de euros, casi otro millón en la "Casa de las Monjas" que sería una "Centro de Alto Rendimiento Deportivo".

Repartían subvenciones a espuertas (Capazos) sin control ni mesura y el pueblo vivía feliz "porque no subían los impuestos" y la derecha era muy buena gestora del dinero público. Pero la bola de la deuda y la ruina iba creciendo y creciendo. Ya no se pagaban prestamos, no podía hacerse frente a la brutal nómina y tuvieron que echar a trabajadores y trabajadoras (precisamente los más necesarios para el funcionamiento de los servicios municipales.

Luego se pedían millones que el Gobierno daba con unas condiciones. Pero el PP se lo pasaba por el forro y una vez recibidos, en vez de Plan de Ajuste, mandaba a Madrid "EL Puto Papel" para "Marear la Perdiz" y aguantar unos meses mas.

Los que habían entregado los millones de los Convenios (Algunos) y los bancos se fueron a los Tribunales y ganaron los pleitos. El Ayuntamiento (El Pueblo al que le habían dicho que todo era gratis total) tenia que hacer frente a sentencias que incrementaban la deuda con intereses millonarios "que nos comían por los pies".

En ese tiempo, había otro Alcalde y otro Gobierno que en la oposición habían criticado la corrupción, recibido insultos y querellas por asegurar que la forma de hacer las cosas era una locura y que el pueblo lo pagaría muy caro.

Pero una parte del pueblo todavía piensa que los que lo llevaron a la ruina eran buenos porque había muchas paellas y roscones, Pantojas (Acompañada de Julián Muñoz) y fiestas. Muchas fiestas y derroche a manos llenas, como la fábula de la cigarra. Que los malos eran lo que decían (Decíamos) que aquello era una locura que pagaríamos muy caro en generaciones enteras.

Y cuando llegó otro acalde y planteó la seriedad, retomar el diálogo con los acreedores cuya deuda e intereses aumentaba cada día, los responsables de la triste situación, según afirmando que ellos eran mejores porque nunca hablaban de problemas y si de "fiestas o grandes proyectos de humo" con carísimas campañas de publicitarias.

El alcalde defendía la seriedad ante Hacienda, la explicación al pueblo de la situación, "el tratamiento como mayores de edad" y que no solo habían sido los gobernantes manirrotos los responsables. También una parte importante de ese sufrido pueblo los había votado varias veces.

Presentó propuestas que eran dolorosas pero la única salida para recibir ayudas, frenar la sangría e intentar estabilizar la situación. Pero algunos seguían con el "Puto Papel" y las volteretas. Y luego, se "le vieron las orejas al lobo" y cedieron ante la razón que solo tiene un camino.

La situación es todavía crítica, pero conseguir pagar sentencias, fernando la acumulación de intereses y quitas (rebajas a la deuda real) considerables es una gestión diferente. Ahora no hay roscones, ni paellas, ni conciertos de Pantojas gratis total. Ni coche de lujo ni guarda espaldas. Trabajo día uy noche para aprovechar el tiempo al máximo y reducir la deuda, utilizando la seriedad y el rigor que impone respeto a acreedores, bancos, Gobierno Regional, Dirección General del Tesoro, Ministerio de Hacienda y al Sursum Corda si hace falta.

No hay Proyecto Faraónicos que eran mentira ni ventas de humo sin consistencia que no aguantan una somera caricia del algodón. Se intenta que haya compromiso, esfuerzo y seriedad que raras veces es reconocido por el pueblo cuya querencia lógica es el viejo aforismo romano de "Panem et circenses".

Como estas rebajas de deuda real y soluciones (junto a otras muchas). Espero se inicie la estabilización de la deuda. Porque nunca será tarde si las decisiones son acertadas y correctas.

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