La Liga de Fútbol "Juega Limpio", organizada por la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Totana, pasará a llamarse a partir de esta nueva temporada Liga de Fútbol "Enrique Ambit Palacios" con el fin de que quede siempre presente su figura, uno de los impulsores de esta actividad tan arraigada en el calendario deportivo local.
La Concejalía de Deportes y el Club de Fútbol de Empresas de esta localidad ya promovieron el pasado mes de mayo un homenaje a título póstumo a Enrique Ambit Palacios con la disputa de un partido amistoso entre los equipos "Los Pachuchos" su equipo- y una selección de la Liga de Fútbol Aficionado.
La concejal de Deportes, Isabel María Molino, elevó hace unos meses una moción al pleno para denominar a la actual Liga de Fútbol de Empresas de Totana con el nombre de "Liga de Fútbol de Empresas Enrique Ambit Palacios".
Trayectoria en favor del deporte local
Enrique Ambit Palacios tuvo un papel predominante durante la transición política en la promoción del deporte local. Él, junto con José Navarro, creó la Liga de Fútbol de Empresas para equipos locales, allá por el año 1982.
Gracias al empeño que puso Ambit Palacios en este proyecto de fútbol local, poco a poco, se fue consolidando y haciéndose imprescindible en la vida deportiva a nivel municipal.
De hecho, junto al Olímpico de Totana son los únicos proyectos deportivos que han tenido continuidad ininterrumpidamente.
Enrique Ambit quitó mucho tiempo a su vida privada para dedicarlo a la promoción del deporte: hizo de organizador, árbitro y jugador del fútbol de empresas.
En los inicios él fue quien animó a la participación en esta Liga de Fútbol Local, y fue el encargado de hacer las inscripciones, los calendarios, designar árbitros, reservar instalaciones, hacer clasificaciones, etcétera, todo a mano, pues entonces no existían los medios tecnológicos de hoy, con la sola ayuda de su amigo José Navarro.
Su tapicería, lugar de trabajo, fue un punto de encuentro del fútbol de empresas. De lunes a sábados, los delegados y jugadores pasaban por allí a ver clasificaciones que colocaba en las paredes, calendarios y como no a cotillear sobre lo acontecido en el campeonato durante el fin de semana.
De hecho, su tapicería fue el local social de la Liga de Fútbol de Empresas, y él siempre tenía palabras y tiempo para todos los que lo visitaban.
Aquellos fueron tiempos de mucha dificultad para la promoción del deporte, sin apenas instalaciones ni recursos. Solo el empeño, o la cabezonería de Enrique, y el cariño que ponía hicieron posible salvar los inconvenientes. Esta loa no sería completa sin hacer referencia a la paciencia y la capacidad de dialogar y consensuar que siempre demostró.
Siempre encontró las palabras justas y necesarias para calmar las tensas situaciones entre delegados y jugadores de equipos, para persuadir a los árbitros cuando no querían seguir "pitando", para quejarse con el máximo respeto de que el campo del poli, entonces de tierra, no estaba en condiciones o para reivindicar ante las autoridades de turno un trato adecuado al campeonato de fútbol de empresas.
En definitiva, es muy probable que hoy no existiese el Campeonato de Fútbol de Empresas "Juega Limpio", si en su día, allá por los primeros años de la transición, Enrique Ambit Palacios no hubiese dedicado su tiempo, esfuerzo y paciencia a hacerlo posible.