El concejal de Bienestar Social, Javier Baños, ha elevado una moción al pleno ordinario de febrero en la que solicita a la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Comunidad Autónoma la implantación de un servicio de acción socioeducativa a través de la figura de los denominados "Educadores de calle" ante la grave situación detectada en niños y jóvenes del municipio.

El Ayuntamiento totanero, a través del equipo de Gobierno y esta Concejalía, tiene una gran preocupación por la situación detectada en Totana, que nos alerta de que, sobre todo entre adolescentes y preadolescentes, se están desarrollando conductas o prácticas nocivas para su propia integridad física y salud, así como para su papel e integración en la sociedad.

Desde el Ayuntamiento, se están llevando a cabo, con la impagable implicación y colaboración de asociaciones y colectivos, acciones orientadas a la búsqueda de espacios y alternativas de ocio, promoción de actividades durante todo el año, inserción en la vida laboral, etcétera.

A pesar de todas estas iniciativas y condicionadas siempre por la escasez de recursos económicos, se hace necesario buscar otras soluciones.

Tras varias reuniones con el personal del Ayuntamiento de las diferentes áreas implicadas y también con colectivos en el ámbito social, se llega a la conclusión de que es importante actuar en el entorno familiar y social de estos jóvenes con el fin de intervenir allí donde se detecten situaciones de riesgo.

Ante esta problemática, es necesaria la intervención con programas de acción socioeducativa, como puede ser la que se está llevando a cabo con éxito en otros municipios y comunidades, a través de la figura de los "Educadores de calle".

Éstos tienen la capacidad de incidir en los núcleos poblacionales más desprotegidos y en un ámbito esencial de socialización al que no llegan las instituciones, actuando en la calle, accediendo a los distintos espacios de la vida del joven en conflicto, mediando entre este y el entorno social para intentar solventar el conflicto en el mismo lugar donde se genera.

Durante los últimos años, la situación de crisis económica generalizada a nivel nacional, sumada a los recortes en la inversión en educación y programas sociales, termina desembocando en patrones de conducta no deseables y de marginación, sobre todo, en los adolescentes y jóvenes, por ser un sector poblacional muy vulnerable.

Ante este panorama de extrema gravedad, con altos niveles de absentismo, adicciones, violencia de género entre menores, entre otros problemas, desde el Ayuntamiento demandamos los recursos necesarios para poder abordar una problemática, que de continuar así puede derivar en una situación muy complicada para estos jóvenes, su familia y la sociedad en general.